El Arzobispado de Granada ya dejó claro cuál era su postura sobre las procesiones de Semana Santa en tiempos de Covid-19: prohibido cualquier culto externo hasta nuevo aviso. Sin embargo, cuando quedan apenas dos semanas para el inicio de la Cuaresma, el arzobispo Francisco Javier Medina se dirige a las hermandades y cofradías de toda la archidiócesis para dar pautas sobre cómo celebrar la Semana Mayor: vía crucis y pregón oficial, altares de cultos, rezos del vía crucis y otros actos de piedad y celebrar comunitariamente el triduo pascual.
Las medidas que ha adoptado el prelado, tomadas del arzobispado de Sevilla tal y como él mismo ha asegurado, animan a revitalizar la vida espiritual de las hermandades y a seguir promoviendo la actividad asistencial. Para ello, además de la celebración de los cultos cuaresmales de las cofradías se permite celebrar “las tradicionales conferencias cuaresmales, el pregón de Semana Santa y el Vía Crucis respetando las orientaciones sanitarias y el aforo permitido”.
Actos permitidos durante la Cuaresma
La carta del arzobispo de Granada deja claro el porqué de las medidas adoptadas y cuál es la finalidad de la suspensión de los actos públicos: evitar la propagación de la pandemia. Por este motivo las cofradías tienen permitido celebrar, en la medida de lo posible, los triduos y quinarios a sus titulares siguiendo siempre las indicaciones sanitarias.
Sin embargo, son muchos los actos que, por reglas, las hermandades celebran en las calles durante la Cuaresma. De acuerdo con las restricciones episcopales, “todos los actos de culto externo serán reemplazados por una celebración de la Palabra, el rezo de la liturgia de las horas o el rezo del vía crucis, el santo rosario u otro acto de piedad”.
De Ramos a Pascua
La Semana Santa de 2021 será de recogimiento y vida interior para las cofradías granadinas, sin demasiada expresión cultural de lo que es la vida de las hermandades en la calle. Por esta razón, el arzobispo prohíbe a los cofrades exponer “las insignias y otros enseres al modo como tradicionalmente se hace el día de la estación de penitencia, lo que coloquialmente conocemos como altares de insignias“. Al igual que faculta a los párrocos y directores espirituales, según juzguen convenientemente, a que “las hermandades puedan entronizar las imágenes titulares en altares efímeros de cultos”.
Monseñor Martínez, en esta misma carta, exhorta a los cofrades a vivir y celebrar el triduo pascual y a sustituir el acto de la estación de penitencia con el “rezo del vía crucis u otro acto de piedad a juicio de su consiliario, incluyendo el rezo del credo, el padrenuestro y la salve”, tal y como se hace a la llegada de las hermandades a la Catedral.
No deja pasar la ocasión el prelado de Granada para recordar a las hermandades el papel que juegan los medios de comunicación, animando a las cofradías a hacer uso de ellos por ser capaces de acercarse a un gran número de fieles, especialmente enfermos, ancianos y familias que viven lejos.
