Cádiz, ciudad de profundas raíces cofrades y cuna de grandes tradiciones, podría estar a punto de saldar una de sus asignaturas pendientes en el ámbito musical: la creación de una banda de música que lleve el nombre de la ciudad y enriquezca las procesiones y actos religiosos locales. Este ilusionante proyecto, denominado provisionalmente Banda de Música Ciudad de Cádiz, comienza a tomar forma y ha despertado el interés de la comunidad cofrade.
Un referente gaditano al frente del proyecto
Uno de los nombres que suena con fuerza detrás de esta iniciativa es el de Manuel Jesús Castro Gomila, destacado músico gaditano con una reconocida trayectoria en el ámbito de la música procesional.
Castro Gomila cuenta en su haber con la autoría de cinco marchas procesionales que han dejado huella:
- «Mi Amor y Esperanza» (2018), dedicada al Nazareno del Amor.
- «Reina del Buen Fin» (2018), en honor a la Dolorosa de Sentencia.
- «Siempre contigo» (2018), compuesta para el Carmen de Conil.
- «Dios te Salve, Rocío» (2020), dedicada a la Virgen del Rocío de Sevilla.
- «A la Madre de Dios del Reposo» (2023).
Con una experiencia de 15 años en la banda Pedro Álvarez Hidalgo y su actual pertenencia a la prestigiosa Banda de La Oliva de Salteras, donde también ejerce como profesor de flauta y saxofón, Castro Gomila aporta una sólida base técnica y artística a este proyecto.
El camino por recorrer: apoyo institucional y sostenibilidad
El proyecto de la Banda de Música Ciudad de Cádiz está aún en sus primeras etapas y depende de una reunión clave con el Ayuntamiento de Cádiz. Este encuentro será determinante para garantizar el apoyo económico y la disposición de infraestructuras necesarias para que la banda pueda convertirse en una realidad sostenible.
Aunque la idea genera gran ilusión entre los aficionados y cofrades gaditanos, es importante señalar que en los últimos años han surgido intentos similares que no lograron consolidarse. Las causas incluyeron falta de financiación, ausencia de calidad musical suficiente o problemas de gestión.
Sin embargo, el perfil y la experiencia de quienes están detrás de esta iniciativa generan optimismo. Además, Cádiz cuenta con un rico tejido cofrade que podría ser el pilar fundamental para apoyar esta propuesta.