El Corpus Christi, la fiesta grande de Granada, se está viviendo este año de una forma muy especial. Atrás queda ya el infame recuerdo de una celebración religiosa y un ferial cancelados por el Covid en 2020. Para esta ocasión, en busca de insuflar un poco de vida y de calle a una fiesta cuya fecha ha caído en un proceso de vuelta a la normalidad -pero no a la nueva, sino a la antigua-, se han organizado una serie de actos para acercar esta festividad a los granadinos en la que no podía faltar su tradicional pregón.
El patio del ayuntamiento se engalanó este martes para acoger la lectura de este discurso, que estuvo cargado de simbolismo, de recuerdos y, sobre todo, de poesía y que corrió a cargo del periodista de Canal Sur Luis Javier López, que no se olvidó de relatar sus vivencias como profesional narrando esta tradicional fiesta granadina.
De ahí que durante su alocución tuviera palabras para la mañana del jueves, en la que «echará de menos» poder contar a través de su micrófono el transcurrir de la Custodia del Corpus Christi, sobre el rachear de zapatillas costaleras.
En su relato de esta jornada, que ocupó la parte principal de su pregón, López convirtió en verbo toda la celebración de la procesión que se desarrolla en el día principal de la festividad granadina, algo que no podrá verse este año. La Sagrada Forma no podrá procesionar, debido a la pandemia, y quedará expuesta en la Catedral, algo que el pregonero aludió con este verso: «Me dicen que este año tampoco vuelve la juncia a besar los pies de la Custodia en la que se engrana el Amor de Granada».
Otro de los emblemas de esta festividad, la Tarasca, también apareció en un lugar destacado de su discurso. El esperado momento de cada año, el outfit de la Pública, que en 2020 lució ataviada como sanitaria, fue hilo conductor del homenaje que quiso rendir Luis Javier López a los auténticos sanitarios que velaron y siguen velando por todos en tiempos de Covid.
En su retórica, estableció un símil entre el dragón que pisa la Pública y el virus del Covid: «Ese dragón ya se adormece en su virulencia y muerte; una Tarasca de blanco impoluto ha vencido nuevamente».
Tampoco faltaron en su voz menciones a personajes destacados de la historia de la ciudad, representados muchos de ellos en los cabezudos que desfilan junto a la Tarasca: Chorrojumo, Virolio, El Niño de Gabia…; menciones a los feriantes y caseteros, grandes perjudicados en la semana grande; y, también, tuvo en sus palabras una mención especial a los apagones de la zona Norte de la ciudad: «Que la luz de una semana sea perpetua en la honradez pagada en recibos de electricidad cortada. Dignidad de barrio que acoge a la masa de gentes con paciencia. Sois la Granada que mira con orgullo como su parcela presta el ocio de la ciudad entera. Por eso, os debemos justicia con vuestras demandas y quejas. Sirva una semana para recordarnos que siempre Almanjáyar merece el mejor sitio en la mesa».
El cierre del pregón vino cargado de esperanza, con guiños hacia la heroína de la ciudad, recientemente homenajeada por el 190 aniversario de su muerte: «La Granada de Mariana, única en inmortalizar la libertad plena, es la esperanza de esta tierra. Defender con bandera de afectos el trabajo de los hombres y mujeres que engalanan sus cuerpos para celebrar la fiesta».
Tras su «he dicho», el alcalde de Granada, Luis Salvador, le hizo entrega de la placa conmemorativa de pregonero 2021 y dedicó unas palabras de esperanza y unidad a los allí presentes, apelando a la recuperación económica de la ciudad. Igualmente, agradeció a Luis Javier López Martín por su «redacción poética con mucho sentimiento dentro».