Lea la Noticia en elcorreoweb
La hermandad de la Soledad de Alcalá del Río suma un nuevo hito al año extraordinario que está celebrando. El Rey de España, Felipe VI, ha aceptado el nombramiento como presidente del comité de honor del XXV aniversario de la Coronación Canónica de Nuestra Señora de los Dolores en su Soledad, titular de la corporación.
En la credencial recibida esta semana por la hermandad, con fecha de 7 de abril y rubricada por el jefe de la Casa Real, Jaime Alfonsín, Su Majestad – “accediendo a la petición que tan amablemente le ha sido formulada” – ha aceptado la Presidencia del Comité de Honor de los actos conmemorativos extraordinarios.
Desde la cofradía del Viernes Santo se ha resaltado el “orgullo” que supone que el Rey haya aceptado este nombramiento, que además confirma “la importancia de esta efeméride en nuestra hermandad y el pueblo”, según recoge el comunicado emitido por la corporación.
Vinculación entre la hermandad y la Casa Real
Del mismo modo, la aceptación de la Presidencia de Honor por parte de Felipe VI reafirma el vínculo entre la hermandad de la Soledad y la Casa Real. No en vano, además del título de Real que ostenta la corporación, el Rey emérito, D. Juan Carlos I, es Hermano Mayor honorario de la corporación desde el año 1987, quien además donó a la dolorosa su fajín de Capitán General de las Fuerzas Armadas en el año 2011.
La hermandad de la Soledad hunde sus raíces en el siglo XVI, de cuando datan las primeras reglas conocidas de la corporación – fechadas en 1582, no son las fundacionales, sino de fusión con la hermandad de San Bartolomé –. Sin embargo, el primer dato conocido data de 1556, cuando un clérigo local deja en su testamento misas “a la efigie de la Soledad con pena”. Sus titulares, Nuestra Señora de los Dolores en su Soledad Coronada y el Señor de la Misericordia, son imágenes anónimas encuadradas por su estilo también en el siglo XVI. Desde estos primeros datos, la corporación ha mantenido la actividad y el culto a lo largo de la historia hasta la actualidad.
Las procesiones extraordinarias han sido aplazadas al otoño
El 15 de junio de 1996 el entonces arzobispo, hoy Cardenal emérito de Sevilla, Carlos Amigo, coronó canónicamente a la dolorosa en un pontifical celebrado en la céntrica plaza de España de la localidad. El prelado hispalense impuso a la Virgen una corona de oro elaborada con las donaciones de los hermanos y devotos, y elaborada por Seco Velasco. Desde el mes de septiembre de 2020 la hermandad viene celebrando las bodas de plata de la coronación canónica.
Si bien, las celebraciones centrales estaban previstas para el próximo mes de junio – cuando se cumple el XXV aniversario – las dos salidas procesionales aprobadas para esta conmemoración han sido aplazadas a causa de la situación sanitaria y con el beneplácito del Arzobispado de Sevilla. Así, según ha explicado la corporación, mientras que en el mes de junio se mantendrán los cultos y actos previstos, las dos procesiones se celebrarán el 31 de octubre – Misa estacional y procesión triunfal – y el 27 de noviembre – Santa Misión con los titulares de la hermandad a las nuevas barriadas de Alcalá del Río