Dedicada a todos nuestros abuelos, aquellos que siempre nos llevaron de la mano cuando éramos niños. Ellos fueron nuestro primer amigo de verdad, nos han cuidado, mimado y querido como solo ellos saben hacerlo. A ellos, los que nunca nos fallaron ni tampoco nunca olvidaremos. A ellos, a los que tenemos que cuidar como un tesoro y a los que ya nos cuidan desde el cielo. Es una Obra original de Javier Cebrero Arias