Con motivo del próximo Rosario de Ánimas, la Hermandad del Carmen rinde homenaje a todas las mujeres que han transmitido la fe de generación en generación en el antiguo Barrio del Espíritu Santo. Este tributo especial es para todas las abuelas que han visto a la Virgen como una vecina más, una hija que comparte con ellas su vida y devoción.
La Escena y Su Significado
El artista Bruno Halcón ha capturado la esencia del barrio y de la hermandad en una escena conmovedora. El escenario es un patio encalado, donde la Virgen y una señora, como dos vecinas, se hacen compañía. La Santísima Virgen del Carmen se presenta como la mejor flor entre las flores, en medio de los patios de los pescadores donde nació la devoción carmelita. La imagen de la Virgen acompaña a una devota mientras «hace red», simbolizando el trabajo y la fe que se han transmitido de generación en generación, con buena marra y anclas firmes.
Detalles del Homenaje
- Vestimenta de la Virgen: La Virgen porta un terno de espolín de seda, que estrenará en el próximo mes de noviembre durante el Rosario de Ánimas. La «Corona de los Pescadores», regalada por la Cofradía de los Pescadores hace 20 años, adorna su cabeza, mientras que el fajín del General de Brigada D. Ramón López Nuche ciñe su cintura.
- Flora Característica: La buganvilla, una flor típica del mes de julio, adorna el recorrido de la Virgen por la calle Salmonete. Los geranios en macetas azules, una seña de identidad del Barrio de los Pescadores, también están presentes.
- Elementos Cerámicos: Las letras de la escena se representan al estilo de los azulejos del nomenclátor conileño, uno de los elementos cerámicos más característicos del pueblo.
- Homenaje a los Mayores: La vecina «haciendo red» es un tributo a los mayores y su labor pesquera, destacando el trabajo que ha sostenido a la comunidad durante años.
Este homenaje no solo celebra la devoción y el trabajo de las mujeres del Barrio del Espíritu Santo, sino que también refuerza la conexión entre la Virgen del Carmen y la comunidad. Gracias a ellas, la fe y las tradiciones han llegado hasta nosotros, fortaleciendo el vínculo entre generaciones y asegurando que la devoción carmelita perdure en el tiempo.