Jerez se prepara para recibir la tradicional Cabalgata de la Cartera Real, que recorrerá el centro de la ciudad el próximo jueves 26 de diciembre, a partir de las 17:30 horas. Este evento, que marca una de las fechas más esperadas de las festividades navideñas, combina tradición, inclusión y accesibilidad para todos los ciudadanos.
Inicio y recorrido de la cabalgata
El cortejo, liderado por la emisaria oficial de los Reyes Magos, partirá desde el Taller de Fiestas y recorrerá lugares emblemáticos como la Glorieta Manuel Azaña, calle Merced, plaza de Santiago y calle Larga, hasta culminar en el Alcázar de Jerez. Allí, la Cartera Real permanecerá los días 28, 29, 30 de diciembre y 2 y 3 de enero, recibiendo las cartas de los niños y niñas de la ciudad.
El itinerario incluirá 2 carrozas, un pasacalles con animadores y figurantes, y la participación de agrupaciones musicales como la Agrupación Musical San Juan. Además, dos trenecitos llevarán a personas de asociaciones como Afamedis, Cedown y ‘Por una Sonrisa’, reforzando el carácter inclusivo del evento.
Una Navidad inclusiva y accesible
Este año, la organización ha puesto especial énfasis en la accesibilidad. Se habilitará una zona reservada para personas con movilidad reducida en la entrada de la calle Larga, y la Cartera Real dedicará dos días exclusivos para personas con discapacidad:
- 2 de enero: Atención prioritaria para personas con trastornos del espectro autista (TEA) y sus familias.
- 3 de enero: Entrega de cartas sin colas para personas con otras discapacidades.
Las visitas se gestionarán a través de la página web oficial www.omad.jerez.es, donde las familias podrán inscribirse y recibir confirmación para un acceso rápido.
Un agradecimiento a la emisaria real
El delegado de Cultura y Fiestas, Francisco Zurita, ha destacado el compromiso de la Cartera Real, quien desde el 2 de diciembre ha trabajado arduamente recorriendo los distintos distritos de la ciudad. Asimismo, la alcaldesa de Jerez, María José García-Pelayo, será la encargada de recibir a la emisaria en la puerta del Alcázar, entregándole simbólicamente las llaves del recinto amurallado.