La Hermandad de la Quinta Angustia de Carmona ha decidido recuperar el acompañamiento musical tras el paso del Señor del Sagrado Descendimiento en la próxima Semana Santa. En un Cabildo General Extraordinario, celebrado el 7 de septiembre, se ratificó esta medida con una votación favorable de 80 votos a favor, 9 en contra y 1 abstención. Esta decisión responde a un anhelo de muchos hermanos y fue inicialmente aprobada por la Junta de Gobierno el pasado 17 de julio.
Este cambio supone el regreso de las marchas procesionales tras el paso del Señor del Descendimiento, una tradición que se había perdido desde 1976, cuando fue acompañado por última vez por el batallón infantil de los salesianos.
Desde la Hermandad expresan que este retorno aportará una mayor solemnidad y recogimiento durante la procesión. La Junta de Gobierno lleva estudiando esta propuesta desde la Cuaresma de 2023, tras la exitosa experiencia del acompañamiento musical durante el Vía Crucis oficial del Consejo de Hermandades y Cofradías de Carmona, presidido por el Señor del Descendimiento.
El Señor del Sagrado Descendimiento, una obra del imaginero carmonense Antonio Eslava Rubio realizada en 1943, destaca por su profunda carga espiritual y simbólica, representando el sacrificio y la resurrección de Cristo. El conjunto escultórico está inspirado en la obra homónima de Pedro Roldán y es acompañado por la imagen de la Virgen de las Lágrimas.
El paso de misterio sobre el que procesiona esta obra maestra es un diseño de Manuel Guzmán Bejarano, inspirado en la urna de San Bernardo de la Catedral de Vich. En los últimos años, ha sido enriquecido con aplicaciones de bronce, cartelas y faroles realizados por el orfebre Jesús Domínguez, así como serafines esculpidos por José Manuel Bonilla Cornejo.
Tras esta Semana Santa, la Junta de Gobierno evaluará los resultados de este cambio y decidirá si el acompañamiento musical se mantendrá en futuras ediciones.