El Convento del Espíritu Santo, primera fundación femenina de Jerez y cuna del tocino de cielo, guarda una trágica historia de amor y muerte que aún estremece a la ciudad.
Enclavado en lo alto de una de las calles más misteriosas de Jerez, el Convento del Espíritu Santo es mucho más que una joya arquitectónica del siglo XIV: es el epicentro de una de las leyendas más estremecedoras del imaginario jerezano, la historia de María de la Merced, el alma en pena que, según se dice, aún vaga entre sus muros.
Este convento fue el primero femenino en fundarse en la ciudad y el más antiguo de todos los existentes, pero hoy sus muros, llenos de historia, se venden al mejor postor tras décadas de abandono. A pesar de haber sido cuna de uno de los dulces más representativos de la ciudad, el tocino de cielo, su estado actual es «lamentable», con más de 18 años sin uso ni mantenimiento adecuado.
Un convento con historia… y con fantasmas
La leyenda se remonta al siglo XVII, cuando vivía en Jerez una joven noble llamada María de la Merced, hija de un caballero influyente. La muchacha se enamoró de un abogado sin fortuna ni posición, lo que desató la furia de su padre, que prohibió la relación y sobornó al joven para que desapareciera. El abogado aceptó el dinero y abandonó la ciudad sin despedirse, dejando a María sumida en la desesperación.
Durante dos años, la joven enfermó de pena. Finalmente, su padre la internó en el Convento del Espíritu Santo, donde pasó sus días en oración, rogando por el regreso de su amado. Pero el dolor pudo más que la fe: una noche se ahorcó en uno de los árboles del patio interior.
Fue enterrada en el mismo convento, pero la historia no acabó ahí. Un mes después de su muerte, comenzaron los avistamientos del espectro de María, vestida de blanco, llorando desconsolada entre los pasillos y jardines. Desde entonces, las novicias tenían prohibido salir al patio al caer la noche.
Un final trágico más allá de la muerte
El relato popular va más allá: se dice que María de la Merced no pudo soportar su pena ni siquiera después de fallecer. Su alma salió del convento en busca de su antiguo amor… y cuando lo encontró, lo mató para estar juntos por siempre en el más allá.
Hoy, en pleno siglo XXI, la leyenda sigue viva. Hay quien asegura haber sentido presencias extrañas, puertas que se abren solas y llantos nocturnos en las inmediaciones del convento. Este enclave, con más de 4.000 m² construidos y jardines interiores, ha estado en venta en portales inmobiliarios desde 2021, generando interés no solo por su valor patrimonial, sino también por su aura inquietante y sobrenatural.
¿Casa encantada o joya histórica?
El Convento del Espíritu Santo, además de sus ecos fantasmales, representa un pedazo único de la historia religiosa, gastronómica y arquitectónica de Jerez. Roma ha autorizado su venta, y las Dominicas buscan cumplir su deseo de desprenderse de este inmueble, considerado una obra singular del Renacimiento andaluz.
A medio camino entre el mito y la realidad, la historia de María de la Merced forma ya parte del legado inmaterial de la ciudad, recordándonos que el amor no siempre termina con un final feliz… ni siquiera con la muerte.