En un inesperado cruce entre deporte y tradición, una de las marchas más emblemáticas de la Semana Santa gaditana ha llegado a los escenarios internacionales de los Juegos Olímpicos de París. Alba Bautista, gimnasta del equipo español de gimnasia rítmica, sorprendió al mundo durante su participación en el concurso de mazas al utilizar la marcha ‘El Amor’, interpretada por la Banda de Cornetas y Tambores del Rosario de Cádiz, como acompañamiento musical.
La elección de esta pieza, conocida por su profunda conexión con la Semana Santa en Andalucía, no pasó desapercibida, generando un momento inusual en el panorama cofrade. ‘El Amor’, compuesta por Sergio Larrinaga, es una de las marchas más reconocidas de la formación gaditana, junto a otras populares composiciones como ‘Eternidad’ y ‘Gitano, tú eres de Santa María’.
La Banda del Rosario de Cádiz, que habitualmente acompaña a imágenes como el Señor de las Penas de la Estrella, el Cristo de las Aguas y el Cristo de la Sed en la capital sevillana, ha visto cómo su música traspasa fronteras y se convierte en parte de uno de los eventos deportivos más grandes del mundo.
Este singular hecho refuerza el impacto cultural de las marchas procesionales andaluzas, demostrando que su belleza y emotividad pueden resonar incluso en los escenarios más inesperados, como los Juegos Olímpicos.