El próximo 12 de octubre, Jerez de la Frontera acogerá la procesión Magna Mariana, un evento histórico en el que 37 imágenes religiosas recorrerán las calles de la ciudad. Este evento, esperado por miles de personas, atraerá a visitantes de toda Andalucía e incluso del extranjero. La ciudad se está preparando para este importante acontecimiento, que promete ser un hito en la Semana Santa y en la vida religiosa de Jerez.
Sin embargo, la organización de la procesión ha generado controversia debido a la falta de accesibilidad para personas con movilidad reducida. El colectivo Izquierda Unida (IU) ha denunciado la falta de consideración del Gobierno Municipal hacia este sector de la población, señalando que el acceso a los 270 espacios reservados ha sido abierto a cualquier persona con discapacidad superior al 33%, sin priorizar a quienes tienen dificultades de movilidad.
Falta de accesibilidad en la Procesión Magna Mariana de Jerez
Raúl Ruiz Berdejo, concejal de IU, ha expresado su descontento afirmando que esta decisión perjudica a las personas con movilidad reducida, quienes, debido al previsible volumen de asistentes, podrían quedarse sin un espacio adecuado para disfrutar de la procesión. «Es una falta de respeto más del Gobierno de Pelayo hacia el colectivo de personas con movilidad reducida», subrayó el concejal, criticando la falta de empatía y la incapacidad de garantizar la accesibilidad universal en un evento de tal magnitud.
Procedimiento para la solicitud de plazas
El Ayuntamiento de Jerez había establecido un procedimiento para la solicitud de estos espacios reservados, pero IU señala que al abrirlo a todo tipo de discapacidades, muchas personas que no tienen problemas de movilidad pueden acceder a los asientos. Esto deja en desventaja a aquellos con limitaciones físicas más severas, quienes encontrarán dificultades para disfrutar del evento desde el espacio público, especialmente con la gran cantidad de asistentes que se espera en las calles.