Un Viernes Santo con hilos sueltos

Nuestra Señora del Desconsuelo en su Soledad, en su paso de palio el Viernes Santo de 2019

Cuando las cofradías de Córdoba tuvieron que adaptarse a la carrera oficial que se estrenaba en 2017, la que hacía estación en la Catedral, hubo muchas jornadas con dificultades para cerrarse. Los horarios variaban, el orden tenía que ser otro y los recorridos no siempre eran fáciles de cuadrar. El Viernes Santo, sin embargo, lo hizo enseguida: conservaría el orden vigente desde 2001, con la Soledad como primera, y comenzaría en la carrera oficial a las 20.30 horas. Sus cinco cofradías no tuvieron problemas para ponerse de acuerdo, porque ya iban todas a la Catedral desde 2008.

La Semana Santa está congelada a la espera de que la evolución del coronavirus permita que las procesiones puedan salir otra vez a la calle, pero cuando regrese, uno de los problemas abiertos es precisamente el Viernes Santo. Su estabilidad se rompió entre los últimos meses de 2019 y los primeros de 2020, cuando entró a formar parte de la nómina la cofradía de la Conversión, que se tendría que haber incorporado el año pasado a la carrera oficial, y que había escogido (y se le concedió) esta jornada.

No fue fácil encontrarle un lugar, porque los horarios de los oficios de los distintos templos impedían a las cofradías salir antes de lo que lo hacen. Era, hasta 2019, el día más tardío de la Semana Santa de Córdoba: no había nazarenos en la calle hasta las seis y diez de la tarde.El Santo Sepulcro recurrió ante la Vicaría General que no se permitiese el cambio de orden

La jornada no se podía adelantar y había que buscar acomodo a la cofradía, que iba a ocupar el cuarto lugar, por detrás de la Soledad, la Expiración y el Descendimiento, que mantendrían sus horarios. La Conversión podría regresar tras cruzar por la carrera oficial vacía cuando pasase la última y buscar por Amador de los Ríos el regreso hacia el oeste.

El acuerdo no se alcanzó sin tiranteces, pero la siguiente sorpresa fue mayor: los Dolores y el Santo Sepulcro iban a permutar su lugar. La Señora sería la última en pasar por la carrera oficial. Las dos cofradías estaban de acuerdo en el cambio, pero la Agrupación de Cofradías no lo validó y obligó a mantener el orden tradicional.

La cofradía de la Compañía recurrió a la Vicaría General y el asunto todavía está por resolver. Su argumento es simple: no hay en la normativa de la Agrupación nada que indique un orden concreto y que impida que el Sepulcro sea la penúltima, como pretendía, porque ambas entendían que sus horarios eran mejores.

El asunto se tendrá que resolver a lo largo este 2021, con el telón de fondo de los nuevos estatutos de la Agrupación de Cofradías, de los que se ha entregado un borrador, pero todavía no tienen ni debate propiamente dicho ni tampoco fecha para enmiendas ni mucho menos votación. Al panorama se sumará el traslado de la Soledad a la parroquia de Franciscanos, que le hará adaptarse a nuevos horarios. El Viernes Santo de la era pos-Covid será muy distinto.

abc

Deja un comentario