Granada ya conoce la imagen que representará su emblemático Corpus Christi 2025. El cartel, una creación del talentoso artista granadino Manuel Rubio Hidalgo, transforma el firmamento local en un lienzo que fusiona espiritualidad, memoria y belleza. La obra, que ha sido calificada como «espiritual», promete capturar la esencia de la fiesta mayor de la ciudad.
La composición central del cartel presenta una figura femenina etérea, construida a partir de nubes, que parece sobrevolar majestuosamente la Alhambra. Esta «gitana» celestial sostiene delicadamente la custodia del Corpus Christi, el corazón de la celebración. Todo ello se enmarca en un cielo azul intenso, un color que, según el autor, evoca el agua del deshielo de Sierra Nevada, que en estas fechas desciende para regar la fértil Vega granadina.
Durante el acto de presentación, el concejal de Cultura, Juan Ramón Ferreira, subrayó el profundo significado de la obra, afirmando que «Rubio ha pintado el alma de Granada en el cielo». Ferreira destacó que el cartel es mucho más que una pieza artística; es una «representación de la emoción colectiva» que envuelve a la ciudad cada año durante el Corpus. En sus palabras, la obra logra capturar «la esencia de Granada como ciudad que vive su tradición con intensidad, pero que también mira al futuro desde el arte y la creación contemporánea».
La escena, que habilidosamente combina simbolismo, paisaje icónico y religiosidad, fue descrita por el concejal como «una metáfora visual de lo que somos: una ciudad suspendida entre el cielo y la tierra, entre la historia y la creación artística». Además, Ferreira resaltó la importancia de esta obra en el contexto de la candidatura de Granada a Capital Europea de la Cultura 2031, señalando que «obras como esta demuestran que Granada tiene un relato cultural propio, con raíces profundas y lenguaje universal».
Manuel Rubio, conocido como el «mercader de las nubes» por su estilo íntimo y con influencias literarias que convierten cielos y nubes en un lenguaje expresivo, explicó la intención detrás de su creación. Su obra, dijo, busca «dar voz al cielo granadino, que también es memoria». «Esta gitana es una Granada hecha nube, hecha alma. No pisa el suelo, sino que lo custodia desde lo alto, como una guardiana invisible que protege nuestra esencia», detalló el artista.
Con formación en Historia del Arte y Museología, Rubio es Técnico de Museografía en la Universidad de Granada y ha expuesto en reconocidos espacios de arte. En su trabajo, los colores no son meros adornos, sino que cobran un sentido narrativo. «El azul que he utilizado es el de los días limpios del Corpus, ese cielo que aparece tras el deshielo de Sierra Nevada y que anuncia la llegada de nuestra fiesta más grande. Es un cielo que solo se da en Granada», concluyó el artista, invitando a todos a contemplar la singular belleza de su obra y, a través de ella, la esencia del Corpus granadino.

