La venerada imagen del Santísimo Cristo de la Buena Muerte, titular de la Hermandad que lleva su nombre en Huelva, realizará una visita histórica a la Parroquia Mayor de San Pedro en el marco de su tradicional Vía Crucis anual. Esta significativa peregrinación, aprobada recientemente en Cabildo de cultos y cuentas por los hermanos de esta Hermandad de raíces agustinianas, se llevará a cabo con motivo del Año Jubilar, otorgando un carácter excepcional a este acto de profunda devoción y espiritualidad.
Este evento marca un hito en la historia de la Hermandad, ya que será la primera vez que la sagrada imagen del Santísimo Cristo de la Buena Muerte visite la Parroquia Mayor de San Pedro desde el año 1941, fecha en la que fue bendecida la imagen el 8 de abril. La iglesia conventual de Santa María de Gracia, sede habitual de la Hermandad, pertenece a la feligresía de la Parroquia Mayor de San Pedro, reforzando así los lazos históricos y espirituales entre ambas instituciones religiosas.
El Vía Crucis anual del Santísimo Cristo de la Buena Muerte es un acto de gran relevancia para la ciudad de Huelva, congregando a numerosos fieles y devotos que acompañan con recogimiento y fervor el recorrido de la imagen por las calles onubenses. Este año, la conmemoración del Año Jubilar añade una dimensión especial al evento, atrayendo a un mayor número de fieles y visitantes que desean participar en esta manifestación de fe y tradición cofrade.
El traslado del Cristo de la Buena Muerte hasta la Parroquia Mayor de San Pedro estará marcado por la solemnidad y el recogimiento, siguiendo una ruta especialmente diseñada para permitir la participación de los devotos y garantizar la seguridad del cortejo procesional. Durante el recorrido, se realizarán diversas estaciones del Vía Crucis, en las que se reflexionará sobre la Pasión y Muerte de Jesucristo, en un ambiente de oración y penitencia que caracteriza a esta Hermandad.
La importancia histórica y espiritual de este acontecimiento refuerza el papel de la Hermandad del Santísimo Cristo de la Buena Muerte en la Semana Santa onubense y en la vida religiosa de la ciudad. La conexión entre la devoción popular, la tradición y la fe se verán reflejadas en cada momento de este acto piadoso, consolidando aún más el arraigo de la Hermandad en la comunidad onubense.
