El Consejo de Hermandades y Cofradías de Dos Hermanas se prepara para un evento cargado de devoción y tradición: el Vía Crucis 2025, que este año estará presidido por la venerada imagen de El Señor Orando en el Huerto. Este acto, uno de los más esperados por los fieles y cofrades de la localidad sevillana, se celebrará el próximo sábado, 8 de marzo de 2025, a las 20:45 horas, y promete ser una experiencia espiritual única en las calles de Dos Hermanas. A continuación, te contamos todos los detalles sobre el recorrido, el acompañamiento, las normas de participación y mucho más.
Recorrido del Vía Crucis con El Señor Orando en el Huerto
El Vía Crucis partirá desde la emblemática parroquia de Santa María Magdalena, un punto de referencia en la vida religiosa de Dos Hermanas. Desde allí, la procesión recorrerá las siguientes calles y plazas:
- Plaza de la Constitución
- Calle Santa María Magdalena
- Plaza Menéndez y Pelayo
- Calle Antonia Díaz
- Calle San Francisco
Y finalizará regresando a la Plaza de la Constitución, donde se espera que cientos de personas se congreguen para acompañar este momento solemne.
Este itinerario, cuidadosamente diseñado, permitirá a los asistentes disfrutar de un recorrido que combina la riqueza histórica y cultural de Dos Hermanas con la esencia del Vía Crucis, una de las celebraciones más significativas de la Cuaresma.
Detalles del Paso y Acompañamiento Musical
El Señor Orando en el Huerto será llevado en unas andas cedidas por la Hermandad de la Candelaria de Sevilla, originalmente utilizadas para Ntro. Padre Jesús de la Salud. Estas andas, símbolo de la colaboración entre hermandades, serán portadas por los hermanos costaleros de la Hermandad de Oración en el Huerto, quienes pondrán su esfuerzo y devoción al servicio de esta procesión especial.
El acompañamiento musical estará a cargo de un trío de capilla, que aportará solemnidad con sus notas, y la Escolanía Infantil del Colegio La Compasión, que actuará como coro, llenando el ambiente de voces juveniles y frescas. Además, el paso estará decorado con un exorno floral compuesto por claveles rojos sangre e iris morados, colores que evocan la pasión y la penitencia, en perfecta sintonía con el espíritu cuaresmal.


