El Niño Jesús de los Humeros clausura este domingo un año histórico de procesiones extraordinarias en Sevilla
Sevilla pondrá este domingo 28 de diciembre el punto final a uno de los años más intensos y extraordinarios que se recuerdan en materia cofrade. Tras meses marcados por celebraciones históricas, aniversarios y cultos externos excepcionales, la capital hispalense despedirá 2025 con una de sus estampas más entrañables: la procesión del Niño Jesús de la Hermandad del Rosario de los Humeros.
Esta salida matutina, ya plenamente consolidada en el calendario devocional sevillano, se convertirá en la última procesión del año en una ciudad que ha vivido un número sin precedentes de autorizaciones extraordinarias, reflejo del momento singular que atraviesan sus hermandades.
Cultos previos y horario de la procesión
La jornada comenzará con la celebración de la Eucaristía en honor al Niño Jesús, que tendrá lugar a las 11:00 horas en la Capilla de Nuestra Señora del Rosario, situada al final de la calle San Laureano, junto a Torneo. Tras la misa, dará comienzo la procesión organizada por el grupo joven de la corporación letífica.
La salida procesional está prevista a las 12:00 horas, prolongándose hasta aproximadamente las 14:00 horas, recorriendo varias calles del entorno de la feligresía de los Humeros.
Itinerario completo del Niño Jesús de los Humeros
El recorrido previsto para esta tradicional procesión será el siguiente:
- Torneo (salida a las 12:00 horas)
- Liñán
- Plaza de la Locomotora
- Bajeles
- Plaza Blasco de Garay
- Dársena
- Barca
- Plaza de la Locomotora
- Liñán
- Torneo
- Entrada en la Capilla del Rosario (14:00 horas)
Un itinerario recogido y muy cercano, que favorece la participación familiar y el ambiente festivo propio de las celebraciones navideñas.
Un paso singular cargado de simbolismo
Uno de los elementos más llamativos de esta procesión es el pequeño paso del Niño Jesús, una auténtica joya por su cuidada iconografía. A los pies del Divino Infante se dispone un belén completo, con el misterio, los Reyes Magos a camello y los pastores, recreando la escena del Nacimiento. El exorno de las andas se completa con corcho y vegetación, reforzando la estética propia de un nacimiento tradicional.
Esta singular composición convierte la procesión en una estampa única dentro del calendario sevillano, especialmente apreciada por los más pequeños y por quienes buscan una vivencia cofrade íntima y cercana.
Raíces históricas y devoción dominica
La devoción al Dulce Nombre de Jesús tiene profundas raíces en la tradición dominica. Ya en 1274, mediante bula del papa Gregorio X, se estableció la obligación de dedicar capillas al culto del Niño Jesús en los conventos de la Orden de Predicadores. Desde entonces, esta devoción se difundió ampliamente, llegando también a la Hermandad del Rosario de los Humeros, donde la imagen del Niño ha recibido culto y ha procesionado en distintas etapas de su historia.
Con esta salida, Sevilla cierra un año irrepetible para las hermandades, en el que tradición, historia y fervor popular han vuelto a encontrarse en las calles, teniendo en el Niño Jesús de los Humeros el broche final a doce meses inolvidables para la ciudad.


