Córdoba se prepara para un evento cofrade sin precedentes: el Vía Crucis Magno de 2025, que se celebrará el sábado 11 de octubre en el entorno de la Santa Iglesia Catedral, conmemorando los 600 años del rezo del Vía Crucis en Occidente, iniciado por el beato Álvaro de Córdoba en 1425. La Agrupación de Hermandades y Cofradías perfila esta gran cita, que se extenderá del 11 al 19 de octubre, con una novedad destacada: los pasos participantes permanecerán una semana en la Catedral, transformándola en un espacio de exposición y veneración. Con casi una veintena de cofradías ya invitadas y seis confirmadas oficialmente, este evento promete superar las expectativas y consolidar a Córdoba como epicentro de la devoción en el Año Jubilar «Peregrinos de la Esperanza».
Las primeras imágenes confirmadas incluyen a Nuestro Padre Jesús Nazareno, el Santísimo Cristo del Remedio de Ánimas y María Santísima de la O, todas de la capital, junto al Santo Sepulcro de El Carpio, la Coronación de Espinas de Fernán Núñez y Nuestro Padre Jesús Caído de Aguilar de la Frontera. Estas cofradías han dado el sí definitivo, mientras otras, como la Oración en el Huerto de Cabra, el Prendimiento, la Sentencia o la Paz y Esperanza de Córdoba, están en proceso de decisión, ya sea en juntas de gobierno o cabildos generales. La lista de invitadas, que roza las veinte, abarca tanto la ciudad como la provincia, reflejando el carácter diocesano del evento y su intención de narrar la Pasión, Muerte y Resurrección de Cristo a través de 34 pasos divididos en cuatro bloques.
A diferencia del Vía Crucis Magno de 2013, donde las imágenes regresaron a sus templos en la madrugada tras el rezo, o la Magna Nazarena de 2019, que combinó procesión y exposición, en 2025 las imágenes permanecerán en la Catedral desde el 11 hasta el 19 de octubre. Esta semana de permanencia, confirmada por Francisco Martínez, hermano mayor del Prendimiento, permitirá a los fieles visitarlas en el templo mayor, con un posible regreso procesional el domingo 19. La coincidencia con el festivo del 13 de octubre —trasladado del 12, Día de la Virgen del Pilar— podría atraer una gran afluencia, potenciando el impacto cultural y espiritual del evento.
El relato del Vía Crucis comenzará con la Oración en el Huerto, representada posiblemente por la cofradía de Cabra, cuyo misterio de Juan Manuel Miñarro destaca por su originalidad al omitir el ángel confortador y mostrar al Señor mirando a los apóstoles dormidos. Le seguirá el Prendimiento de Córdoba, cuyo paso espera aprobación en cabildo, y el juicio ante los tribunales, con invitados como Jesús de la Redención ante Caifás de la Estrella y Jesús de la Sentencia, que decidirá su participación el 27 de marzo. Desde la provincia, el Señor de los Afligidos de Puente Genil aportará su Presentación al Pueblo, mientras dos Coronaciones de Espinas —la confirmada de Fernán Núñez y la invitada de la Merced— enriquecerán el recorrido.
El camino al Calvario incluirá a Jesús Nazareno, ya confirmado, junto a invitados como Jesús del Calvario y el Buen Suceso, este último con el encuentro de Cristo y su Madre. La Crucifixión podría estar representada por la Expiración de La Rambla, con su valiosa talla del siglo XVII, y el Santo Sepulcro de El Carpio, con una urna de Gregorio Fernández, ya asegurada. El broche final lo pondría Jesús Resucitado, cuya cofradía, liderada por Francisco Mora, evalúa participar con la imagen que simboliza la victoria sobre la muerte.
Una novedad absoluta será la presencia de pasos de palio, destacando las advocaciones de la Esperanza en este Año Jubilar. María Santísima de la Paz y Esperanza, María Santísima de la O —ya confirmada— y María Santísima de Esperanza de la hermandad de la Esperanza aguardan decisiones de sus cabildos, aportando un toque mariano inédito frente a la predominancia de pasos de misterio en citas previas. La Virgen de las Angustias, con sus icónicas tallas de Juan de Mesa, también está invitada, reforzando su vínculo histórico con el beato Álvaro, impulsor de esta advocación en Córdoba.
El recorrido, aún en diseño, podría replicar el itinerario oficial de la Semana Santa, desde la Puerta del Puente hasta el Patio de los Naranjos vía Torrijos y Cardenal Herrero. Los pasos de la capital partirán de sus sedes, mientras los de la provincia buscarán cobijo en iglesias cercanas antes de unirse al cortejo. Con esta estructura, el Vía Crucis Magno de 2025 no solo evocará los 600 años de tradición de Scala Coeli, sino que también ofrecerá una semana de devoción y arte en la Catedral, reafirmando a Córdoba como «Vía Sacra de Occidente».

