La Semana Santa de Sevilla es mucho más que una manifestación religiosa. Es la expresión viva de una ciudad que late al ritmo de sus cofradías, que se transforma durante siete días —desde el Domingo de Ramos hasta el Domingo de Resurrección— en un escenario único donde la fe, el arte y la tradición se funden con una pasión colectiva sin igual. Con más de 60 hermandades recorriendo las calles en sus estaciones de penitencia, Sevilla se convierte cada primavera en el centro espiritual y cultural del mundo cofrade.
Origen y evolución histórica de las cofradías sevillanas
Los desfiles procesionales de la Semana Santa sevillana tienen sus raíces en manifestaciones piadosas populares que surgieron a finales del siglo XV. Desde entonces, la evolución histórica, artística y social de las hermandades ha marcado hitos fundamentales. Las cofradías, nacidas en torno a gremios u órdenes religiosas, han sabido adaptarse a los tiempos sin perder su esencia, dando forma al modelo actual de procesión que conocemos hoy.
El Cabildo de Toma de Horas: la organización secular de las procesiones
Desde 1604, el Cabildo de Toma de Horas es el acto oficial que marca los horarios e itinerarios de cada hermandad en su tránsito por la Carrera Oficial. Esta reunión protocolaria, que originalmente se celebraba en la Capilla de las Doncellas de la Catedral y que hoy tiene lugar en la Capilla Real ante la Virgen de los Reyes, establece con precisión el día, hora y recorrido de cada corporación en su Estación de Penitencia.
La Carrera Oficial: el eje común de todas las hermandades
Todas las hermandades que realizan Estación de Penitencia a la Catedral deben recorrer la conocida Carrera Oficial, que comienza en la plaza de la Campana, continúa por la calle Sierpes, la plaza de San Francisco y la avenida de la Constitución hasta llegar a la Catedral. Allí, en el altar mayor, se realiza el acto central de la procesión antes del regreso a sus templos. Este itinerario común organiza el tránsito de las cofradías y permite al Consejo General de Hermandades y Cofradías coordinar el complejo engranaje que hace posible la Semana Santa sevillana.
La vida de hermandad durante todo el año
Aunque la Semana Santa se concentra en una semana, la vida de las hermandades continúa a lo largo del año. Su actividad se sustenta en tres pilares: la formación, el culto y la caridad. A través de cultos internos como quinarios, triduos, novenas, vía crucis y besamanos, y de una intensa labor asistencial, las cofradías mantienen viva su misión espiritual y social. Además, la preparación de la salida procesional comienza meses antes, con ensayos de costaleros, montajes de pasos y organización interna.
Nazarenos, costaleros y capataces: protagonistas del cortejo
Los cortejos procesionales están formados por cientos —a veces miles— de nazarenos que, ataviados con túnicas y antifaces según los colores de cada hermandad, portan cirios, cruces o insignias. Tras ellos, los costaleros cargan sobre sus hombros los pasos, auténticas joyas del arte sacro andaluz que representan escenas de la Pasión o a imágenes marianas bajo palio. Los capataces, con su llamador o martillo, son los encargados de dirigir la cuadrilla, con arte, compás y autoridad.
Vocabulario esencial para entender la Semana Santa sevillana
El universo cofrade tiene su propio lenguaje. La «chicotá» es cada tramo que recorre el paso sin detenerse; la «levantá», el momento en que se alza el paso con el esfuerzo de los costaleros. «Pedir la venia» es el protocolo que realiza cada hermandad para acceder a la Carrera Oficial. La «bulla» es la aglomeración que acompaña a cada cofradía y la «saeta», ese canto desgarrado y sincero que se eleva espontáneamente desde un balcón o a pie de calle.
La mantilla: tradición femenina de Jueves y Viernes Santo
Una de las tradiciones más vistosas de la Semana Santa sevillana es el uso de la mantilla por parte de las mujeres en señal de luto. El Jueves y el Viernes Santo, numerosas sevillanas visten de negro riguroso, con peineta y mantilla de blonda o chantilly, guantes, rosarios y joyas antiguas, rememorando costumbres que resurgieron con fuerza en los años ochenta y que hoy siguen vivas.
El arte de la imaginería y el legado de los grandes maestros
Las imágenes que procesionan por Sevilla no son solo objetos de devoción, sino auténticas obras maestras del arte barroco. Imagineros como Martínez Montañés, Juan de Mesa, Pedro Roldán o La Roldana tallaron con maestría las figuras de Cristo y la Virgen que conmueven a miles de fieles cada año. Muchas de estas imágenes datan de los siglos XVI y XVII, y su conservación y restauración es una prioridad para las hermandades.
Tradiciones populares y costumbres en torno a la Semana Santa
Desde el estreno de una prenda el Domingo de Ramos hasta la visita matutina a los templos para ver los pasos preparados, la Semana Santa está repleta de tradiciones. El olor a incienso y azahar, el sonido de las bandas, el sabor de platos típicos como las espinacas con garbanzos o las torrijas, y la emotividad de la Madrugá forman parte del alma popular de Sevilla en estos días.
Días y horarios de las procesiones: una ciudad en movimiento
Cada día de la Semana Santa sevillana tiene su identidad. El Viernes de Dolores y el Sábado de Pasión anuncian con cofradías de barrios la inminente llegada del Domingo de Ramos, cuando arranca oficialmente la Semana Mayor. A partir de ahí, del Lunes al Miércoles Santo, la ciudad vive una transformación constante con procesiones desde la mañana hasta la madrugada. El Jueves Santo culmina con la salida de cofradías históricas y da paso a la Madrugá, el momento más intenso y simbólico. El Viernes Santo por la tarde, el Sábado Santo y el Domingo de Resurrección completan el ciclo con sobriedad, recogimiento y esperanza.
El Santo Entierro Grande: la gran celebración extraordinaria
En ocasiones excepcionales, Sevilla celebra el Santo Entierro Grande, una procesión donde participan pasos de distintas hermandades representando cronológicamente la Pasión de Cristo. La última edición fue en 2004, con 14 pasos. Es un acontecimiento histórico que sólo se ha producido en nueve ocasiones desde el siglo XIX y que concita el interés de toda España.
Datos curiosos y récords de la Semana Santa sevillana
La Hermandad de la Macarena es la que cuenta con más nazarenos, casi 3.000, mientras que la Sagrada Mortaja es la que menos lleva. La Hermandad de la Sed y la de San Pablo realizan los recorridos más largos, mientras que Santa Marta y el Santo Entierro tienen los más breves. La cofradía que antes entra es La Borriquita, mientras que San Gonzalo, Los Panaderos y La Bofetá son las últimas. El paso más pesado es el de la Sagrada Cena y el más ligero, «La Canina» del Santo Entierro.
Una semana de fe que es patrimonio universal
La Semana Santa de Sevilla es un fenómeno único que combina fe, arte, historia y cultura. Cada paso, cada gesto, cada sonido forma parte de una liturgia colectiva que emociona y une. Para sevillanos y visitantes, esta celebración es una experiencia irrepetible que deja una huella imborrable en el alma.

