La Hermandad del Rosario de los Humeros ha presentado una de las incorporaciones más esperadas a su patrimonio procesional: el nuevo trono de Nuestra Señora del Rosario, una pieza que se convierte en el eje central del ajuar de la titular letífica de este histórico arrabal sevillano.
La obra ha sido ejecutada por el tallista Antonio Comas Pérez, quien ha materializado un proyecto largamente anhelado por generaciones de hermanos y devotos, culminando así un sueño que dota a la Virgen del Rosario de un soporte artístico a la altura de su riqueza patrimonial y de la devoción que despierta en Sevilla.
Un diseño inspirado en la tradición francesa del siglo XVIII
El nuevo trono sigue las directrices artísticas del barroco y del rococó, estilos que alcanzaron su esplendor durante los reinados de Luis XV y Fernando VI. Su lenguaje estético responde a la búsqueda de belleza y simbolismo, con un marcado carácter ornamental y devocional.
Entre los elementos más destacados del diseño se encuentra un respaldo curvado tipo góndola, con una pala central en forma de lira que alberga un medallón con las “C” contrapuestas, enlazadas con diez cuentas de rosario en alusión al decenario mariano. También figuran cinco rosas estilizadas que evocan los misterios del Rosario y una profusión de motivos florales que subrayan la advocación mariana de la imagen.
El trono combina elegancia y dinamismo, con líneas curvas y contracurvas propias del rococó, volutas finamente trabajadas y detalles calados que permiten una visión transparente de la talla desde distintos ángulos, aportando un efecto de ligereza y espiritualidad.
Una pieza simbólica y esperada
La incorporación de este trono no es solo un avance estético, sino también devocional. Su simbología mariana se entrelaza con la historia de la Hermandad, que ha esperado durante años la culminación de este proyecto. La pieza ha sido sufragada gracias al esfuerzo conjunto de los hermanos y devotos de la corporación, lo que refuerza su valor comunitario y espiritual.


