Sevilla se consolidó como epicentro del arte sacro y la tradición cofrade en 1992 con la celebración de dos exposiciones memorables: ‘Los Esplendores de Sevilla’ y la ‘Magna Hispalensis’, organizadas en el marco del Quinto Centenario del Descubrimiento de América y el Santo Entierro Grande. En esta ocasión, recordamos ‘Los Esplendores de Sevilla’, una muestra distribuida en tres zonas que capturó la esencia del patrimonio cofrade sevillano.
‘Los Esplendores de Sevilla’: Tres Espacios, Una Muestra Inigualable
Inaugurada el 25 de junio de 1992 y extendida durante el mes de julio, ‘Los Esplendores de Sevilla’ se dividió en tres zonas clave: ‘La Pasión’, ubicada en la Iglesia Colegial del Salvador; ‘Las Glorias’, en la Iglesia del Hospital de la Virgen de la Paz; y ‘Los Tesoros’, en el edificio de la Caja San Fernando (hoy Fundación Cajasol).
La Pasíón: Pasos Procesionales Icónicos
En ‘La Pasión’, los visitantes pudieron admirar seis pasos procesionales con sus respectivas imágenes: el misterio del Señor de la Sagrada Presentación al Pueblo de San Benito, el Cristo del Amor, el Señor de Pasión, el Cristo de la Exaltación, y los pasos de palio de la Virgen del Dulce Nombre y la Virgen de la Victoria de las Cigarreras.
Las Glorias: Una Muestra Letífica de Devoción
‘Las Glorias’ reunió a ocho de las imágenes letífícas más emblemáticas de Sevilla: la Reina de Todos los Santos, la Virgen del Amparo, la Virgen de la Alegría, la Virgen de la Salud de San Isidoro, la Pastora de Santa Marina, la Virgen de la Esperanza Divina Enfermera, la Virgen de la Luz y la Virgen de los Reyes, conocida como la Virgen de los Sastres.
Los Tesoros: Arte Cofrade de Todos los Tiempos
En la sección ‘Los Tesoros’, ubicada en la antigua Caja San Fernando, se expusieron piezas de gran valor patrimonial. En la planta baja destacaron las carretas de las hermandades del Rocío de Triana y El Salvador, custodias como las de la Sacramental de la Magdalena, Santa Ana de Triana y El Salvador, además de elementos como los respiraderos del paso del Señor de la Divina Misericordia y el techo de palio de la Virgen de la Cabeza. También se exhibieron la cruz de carey del Nazareno de la O, los blandones de la Candelaria y simpecados de las hermandades del Valle y la Amargura.
En la planta superior se presentaron piezas de orfebrería, como coronas de oro y plata, diademas, potencias, puñales y nimbos, junto con mantos de salida de dolorosas como las de San Roque, el Valle, la Esperanza de Triana, San Isidoro y el Santo Entierro. Asimismo, se mostraron las bambalinas de los pasos de palio del Amor, los Negritos, los Gitanos y el Cachorro.
Traslados y Recuerdos para la Historia
Los pasos procesionales fueron trasladados públicamente a sus respectivas zonas expositivas y regresaron a sus templos el 25 de julio de 1992, dejando un verano inolvidable para los cofrades de toda una generación.
Un Legado Vivo
Treinta y dos años después, el impacto de ‘Los Esplendores de Sevilla’ sigue vigente, inspirando eventos como ‘In Nomine Dei’, celebrada en 2021. Esta exposición no solo reafirma la riqueza del patrimonio cofrade sevillano, sino que también resalta su papel fundamental en la cultura e identidad de la ciudad.

