a histórica procesión extraordinaria del Santísimo Cristo de San Agustín, celebrada en la ciudad de Sevilla, dejó momentos inolvidables que han quedado grabados en la memoria de los asistentes. Uno de los más destacados fue la interpretación de la marcha ¡Miradlo en la Cruz! en la calle Muñoz y Pabón, un enclave cargado de simbolismo. Esta composición, obra del reconocido músico David Hurtado Torres, ha sido un éxito desde su estreno y se consolida como una de las piezas más interpretadas en los actos religiosos del año.
Homenaje a Muñoz y Pabón: Música y Devoción
La elección de este lugar no fue casual. La calle lleva el nombre del autor José María Muñoz y Pabón, cuyas coplas al Cristo de Burgos inspiraron el título y espíritu de la marcha. Los versos del poeta sevillano, que exaltan la pasión y sacrificio de Cristo, resuenan en cada nota de la composición, creando un vínculo entre la tradición literaria y la musical.
“Temblad, universos, que ha muerto la vida,
y ha sido extinguida la luz de la luz.”
Estos versos, cargados de solemnidad, forman parte de la obra literaria que marcó el punto de partida para que David Hurtado desarrollara una pieza que ya es icónica en la Semana Santa sevillana.
Un Éxito que Traspasa Fronteras
Estrenada en la parroquia de San Pedro durante la pasada Cuaresma, ¡Miradlo en la Cruz! no tardó en conquistar los corazones de los cofrades. La Banda del Maestro Tejera le dio vida por primera vez en un concierto, y desde entonces, la obra ha sido interpretada en actos destacados, como el centenario fundacional de los Estudiantes y el cierre del II Congreso Internacional de Hermandades y Piedad Popular.
En la procesión extraordinaria del Cristo de San Agustín, la marcha sonó magistralmente por parte de la Banda de la Cruz Roja. Su interpretación en Muñoz y Pabón, donde la imagen del crucificado fue recibida entre aplausos y oraciones, fue un momento álgido del recorrido, cargado de espiritualidad y emoción.
El Legado de una Marcha Inolvidable
La relación entre la talla del Cristo de San Agustín, atribuida a Juan Bautista Vázquez ‘El Viejo’, y el Cristo de Burgos, al que están dedicadas las coplas, subraya la conexión histórica y devocional que Sevilla mantiene viva. Esta procesión no solo ha sido un homenaje a los 450 años de la talla del Cristo de Burgos, sino también un tributo a la riqueza artística y cultural que envuelve a la Semana Santa hispalense.
El Futuro de ¡Miradlo en la Cruz! en la Semana Santa
Con cada interpretación, la marcha de David Hurtado Torres refuerza su lugar en el repertorio musical cofrade. Su creciente popularidad la posiciona como una obra que seguirá resonando en las calles de Sevilla y más allá, perpetuando el legado de la fe y el arte que define a esta ciudad.

