El delegado diocesano de Hermandades y Cofradías del Arzobispado de Sevilla, Marcelino Manzano, ha asegurado en decaraciones a ABC que «no se contempla ninguna celebración extraordinaria en la Catedral de Sevilla durante la Semana Santa» en caso de que, como parece probable, se suspendan las procesiones, «entre otras cosas porque la Catedral tiene su propia actividad litúrgica centrada en la celebración del triduo pascual».
«Si se suspenden las estaciones de penitencia, los actos de piedad sustitutivos hay que centrarlos en las sedes canónicas de las hermandades y en torno a sus parroquias, que son las que celebran el triduo pascual, que constituye el centro de todas las celebraciones», señala Manzano.
La Catedral de Sevilla sí que acogerá, no obstante, la celebración del Viacrucis de las Cofradías que el Consejo de Hermandades viene organizando ininterrumpidamente desde 1976 en la fecha del primer lunes de Cuaresma, que el próximo año será el 22 de febrero. «Sé que el Consejo de Cofradías tiene la intención de celebrar el Viacrucis en la Catedral, aunque ya se estudiará la forma». Cada año es una imagen titular de una hermandad sevillana la que se traslada a la Catedral para presidir el rezo de las catorce estaciones del Viacrucis en el primer templo metropolitano. A la altura del calendario en que nos encontramos, y cuando ya se divisan las fiestas navideñas en el horizonte, el Consejo de Cofradías que preside Francisco Vélez de Luna aún no ha designado a ninguna imagen para presidir el que constituye todos los años el primer gran acto público de la Cuaresma sevillana.
Marcelino Manzano reconoce que en la reunión que mantuvo este sábado con los 21 presidentes de los consejos locales de hermandades de toda la Archidiócesis ya se analizaron «las recomendaciones o líneas básicas para comunicar a las hermandades de cara a la próxima Cuaresma», la segunda que se verá alterada por la pandemia del coronavirus. «Lo principal es que las hermandades, a diferencia de la Cuaresma pasada en la que estuvimos confinados, van a poder celebrar sus cultos de reglas con las medidas sanitarias» que en ese momento prescriban las autoridades.
Nada de «cosas raras»
En caso de que nuevamente se suspendan las procesiones en 2021, Manzano asegura que «la máxima» será seguir las indicaciones dictadas por la Asamblea de Obispos del Sur del pasado mes de octubre, en las que recomendaban a las cofradías «evitar sucedáneos de la verdadera piedad popular y la cosas raras».
«Confío en el buen criterio de las hermandades para que no haya que decretarlo todo por escrito, pero si es necesario descender a explicitar esas indicaciones, lo haremos». En este sentido, el delegado diocesano de Hermandades asevera que, en caso de suspensión de las estaciones de penitencia, las hermandades deberán celebrar los actos de piedad que tengan recogidos en sus reglas «igual que cuando llueve, un viacrucis o lo que sea». «Eso sí podrán hacerlo y daremos indicaciones al respecto», señala.
