Un acto lleno de simbolismo en la parroquia
El Grupo Parroquial de Nuestra Señora de Belén celebró este domingo un momento clave de cara a su próxima salida procesional: la presentación oficial del cartel anunciador que difundirá los cultos y la procesión previstos para el 13 de diciembre, así como los actos devocionales programados entre el 19 y el 22 del mismo mes.
Tras la eucaristía, los fieles pudieron descubrir la obra que representará a la corporación durante estas semanas de preparación.
El cartel, una visión personal del pintor cordobés Mario Ramos
La obra, realizada en óleo sobre tabla (50×80 cm), es creación del joven artista cordobés Mario Ramos, quien compartió con los asistentes la inspiración y el mensaje devocional que encierra la pintura.
La pieza lleva por título “La adoración de los pastorcillos”, una escena que, según explicó el autor, procede de uno de los instantes más entrañables de la procesión de la Virgen de Belén: la llegada de los niños vestidos de pastores que abren el cortejo agitando campanitas y anunciando el paso de la imagen.
Una composición dividida en tres planos: la Virgen, los niños y la ciudad
Ramos detalló que la pintura se organiza en torno a tres elementos principales:
- la Virgen de Belén,
- los pastorcillos,
- y el entorno urbano que envuelve la escena.
La imagen mariana ocupa el sector izquierdo, trazando una diagonal que recorre toda la composición. El pintor destacó la riqueza cromática de la titular, vestida con saya de brocado amarillo, detalles en verde y flores multicolor, así como un manto morado cardenal que identifica a la asociación.
La Virgen aparece coronada en plata y adornada con pendientes de estrellas y un alfiler con esmeraldas, signo —según precisó el autor— del Año Jubilar de la Esperanza que se está celebrando.
La mano derecha de María sostiene y muestra al Niño Jesús, revestido de tonos celestes y encajes blancos, mientras que la izquierda se abre hacia los pequeños que avanzan para ofrecerle su cariño.
Los pastorcillos, centro emocional de la escena
El artista quiso dedicar un lugar especial a los cuatro niños representados, todos ellos muy vinculados a su entorno familiar. Se trata de Manuel, Nieves, Álvaro y Valentina, a quienes considera claves en la historia que narra el cartel.
- Manuel guía al grupo desde la parte superior portando un zurrón con instrumentos, homenaje a la afición del pintor por la música sacra.
- Nieves, sonriente, se acerca curiosa a la Virgen mientras sostiene la mantilla.
- Valentina besa la mano de María y le entrega flores de geranio como muestra de gratitud.
- Álvaro anuncia la llegada de la Señora haciendo sonar una campanita y portando la medalla del grupo parroquial.
Ramos explicó que estos pequeños representan una invitación directa al espectador a participar en la procesión del 13 de diciembre, que comenzará a las 17:00 horas por las calles de Córdoba.


