La Hermandad de San Esteban ha hecho pública la confirmación de las bandas y equipos de capataces que acompañarán a sus pasos en la jornada del Martes Santo de 2026. La corporación que preside Luis Tovaruela apuesta por la continuidad, renovando tanto a las formaciones musicales como a los responsables del martillo que ya participaron en anteriores estaciones de penitencia.
Así, la Agrupación Musical Virgen de los Reyes volverá a situarse tras el Señor de la Salud y Buen Viaje, mientras que la Banda de Música de Nuestra Señora de la Victoria, conocida popularmente como Las Cigarreras, repetirá en el acompañamiento de la Virgen de los Desamparados. Ambas formaciones mantienen un vínculo consolidado con la hermandad, aportando un sello sonoro reconocible dentro de la Semana Santa hispalense.
Del mismo modo, la junta de gobierno ratifica a sus capataces: Mariano Falcón continuará al frente del paso de misterio, mientras que Juan José Cobos dirigirá nuevamente el palio. Ambos asumieron estas responsabilidades en 2018 y cuentan con amplia trayectoria en otras corporaciones, lo que ha contribuido a consolidar un estilo propio en San Esteban.
La Agrupación Musical Virgen de los Reyes es una de las formaciones más presentes en la ciudad, acompañando también en otras hermandades como las de Jesús Despojado, San Pablo, la Resurrección o San Bernardo, entre otras. Su participación en San Esteban se ha convertido en una de sus citas más esperadas del Martes Santo.
Por su parte, la Banda de Música de Nuestra Señora de la Victoria de Las Cigarreras acumula un notable papel dentro del panorama musical cofrade sevillano, situándose tras los palios de hermandades del Amor, la Lanzada, la Esperanza de Triana, las propias Cigarreras y la Resurrección, además de diversas procesiones de gloria durante el año.
En cuanto a los capataces, Mariano Falcón también dirige el misterio de la Exaltación el Jueves Santo, mientras que Juan José Cobos se pone al frente del Cristo de la Salud de la Carretería el Viernes Santo y de la Virgen de la Palma del Buen Fin cada Miércoles Santo. La continuidad de ambos garantiza estabilidad y un estilo ya plenamente reconocible en la hermandad del barrio de San Esteban.

