La Semana Santa de 2024 en Cádiz será recordada como un desafío sin precedentes para las hermandades locales. Las persistentes lluvias frustraron los planes de la mayoría, impidiendo que las procesiones llenaran las calles con sus imágenes devocionales y fervor tradicional. Aunque algunas cofradías lograron salir, lo hicieron enfrentando obstáculos como recorridos incompletos o prisas inesperadas. Sin embargo, el caso de la Hermandad de la Vera-Cruz destacó por una decisión que aún resuena: procesionar sin sus imágenes titulares, desencadenando una controversia que ha terminado en una sanción económica por parte del Consejo Local de Hermandades y Cofradías.
Una procesión atípica en el Lunes Santo
El Lunes Santo de 2024 amaneció con incertidumbre meteorológica en Cádiz. A pesar de los claros que se abrieron por la tarde, la mayoría de las hermandades optaron por la prudencia. No así la Vera-Cruz, con sede en la Iglesia de San Francisco. Tras intensas deliberaciones, la hermandad decidió salir a la calle, pero no con el Santísimo Cristo de la Vera-Cruz ni la Virgen de la Soledad, sus titulares oficiales, sino con el Lignum Crucis, una reliquia que la cofradía defendió como parte de su identidad procesional.
Esta elección desató un debate inmediato. La hermandad argumentó que tenía potestad para hacerlo, mientras que el Consejo y la Delegación Diocesana sostuvieron que incumplía los estatutos, que exigen la presencia de los titulares en toda estación de penitencia. Aunque la procesión sorprendió a hermanos y espectadores, no fue este hecho el que motivó la sanción, sino lo que ocurrió después.
El origen de la sanción: faltas de respeto
El Consejo abrió un expediente sancionador tras analizar lo sucedido aquel Lunes Santo y los eventos posteriores. Según Juan Carlos Jurado, presidente del Consejo, en una entrevista con La Voz y COPE, la procesión con el Lignum Crucis fue un incumplimiento interno de los estatutos de la hermandad, pero no competencia directa del Consejo para sancionar. Sin embargo, las «faltas de respeto e insultos» de la junta de gobierno de Vera-Cruz hacia miembros de la Permanente y el pleno de hermanos mayores en los días y semanas siguientes cruzaron la línea.
Jurado explicó: «No podíamos sancionar por el Lignum Crucis, pero sí por la falta de decoro. El expediente se ha resuelto con una multa económica, y la hermandad ha recurrido ante la Delegación Diocesana, como es su derecho». Además, el Vicario General ha emitido directrices que ya prohíben explícitamente procesionar sin titulares, cerrando así futuras polémicas de este tipo.
Claves de la controversia
- Procesión sin titulares: La decisión de salir solo con el Lignum Crucis generó división entre cofrades y autoridades eclesiásticas.
- Faltas de respeto: Las desconsideraciones de la junta de gobierno hacia el Consejo fueron el detonante de la sanción.
- Sanción económica: La multa, aún en disputa, busca zanjar el conflicto, aunque la hermandad mantiene su recurso activo.
- Reglamento actualizado: Nuevas normas refuerzan la obligatoriedad de procesionar con titulares, evitando casos similares.
Un conflicto que persiste
La relación entre la Hermandad de la Vera-Cruz y el Consejo sigue tensa a día de hoy, 9 de abril de 2025. Lo que comenzó como una respuesta creativa a un Lunes Santo lluvioso ha derivado en un enfrentamiento institucional que pone en jaque la unidad cofrade en Cádiz. Mientras la hermandad defiende su autonomía, el Consejo subraya la necesidad de respeto y orden. Con el recurso aún pendiente en la Delegación Diocesana, la resolución final sigue en el aire, marcando un capítulo más en la historia de la Semana Santa gaditana.

