El reciente cambio en la carrera oficial de la Semana Santa de Cádiz, que ahora culmina en la Plaza del Palillero, ha generado múltiples expectativas y controversias. Sin embargo, las primeras decisiones de las hermandades parecen reflejar más cautela que innovación, dejando los mayores ajustes para 2026.
Un cambio prudente, pero sin grandes modificaciones
El objetivo principal de trasladar el final de la carrera oficial al Palillero era facilitar el regreso de las hermandades con mayor distancia a sus templos y permitir que los cortejos evitaran aglomeraciones innecesarias. Sin embargo, la mayoría de las hermandades han optado por mantener sus horarios prácticamente intactos para este 2025.
Este enfoque conservador, al parecer, responde a dos factores principales:
- La incertidumbre sobre el funcionamiento del nuevo itinerario. Muchas hermandades quieren observar cómo se desarrolla la Semana Santa este año antes de realizar ajustes más significativos.
- El recuerdo de la suspensión de 2024. Tras un año sin Semana Santa debido a las inclemencias meteorológicas, el ‘riesgo’ de experimentar con nuevos horarios y recorridos se percibe como innecesario.
El enigma de los horarios: ajustes mínimos e incomprensibles
El cambio en el itinerario debería, en teoría, reducir los tiempos de entrada de las cofradías al eliminar el rodeo por las calles Novena y Barrié. Sin embargo, resulta sorprendente que varias hermandades no solo no han recortado sus horarios, sino que incluso han retrasado su llegada respecto a 2024.
Asimismo, las diferencias en los ajustes de tiempo entre hermandades son notorias. Mientras unas anuncian recortes de hasta 20 minutos, otras apenas registran 5 minutos de ahorro. Estas inconsistencias han dejado perplejos a muchos fieles y cofrades.
El eterno misterio del reparto del tiempo
Uno de los debates más recurrentes gira en torno a los criterios utilizados para asignar los tiempos de paso por la carrera oficial. Las comparaciones entre hermandades de distinta envergadura resultan, cuanto menos, desconcertantes:
- Miércoles Santo: Una hermandad con más de 300 nazarenos y dos pasos con música tiene 55 minutos de paso.
- Lunes Santo: Una hermandad similar dispone del mismo tiempo, pese a contar con menos participantes.
- Domingo de Ramos y Jueves Santo: Hermandades con cortejos de dimensiones similares tienen tiempos asignados radicalmente distintos, con diferencias de hasta 15 minutos.
Estas aparentes contradicciones generan frustración entre las fiscalías de las cofradías y dejan abierta la pregunta: ¿Quién y cómo se decide el reparto del tiempo en Cobos?
Mirando hacia 2026
Aunque el cambio del final de la carrera oficial al Palillero es un paso significativo, parece que será en 2026 cuando se consoliden ajustes más ambiciosos en horarios y recorridos. Este año, la prudencia prevalece, lo que podría ofrecer una valiosa oportunidad para analizar a fondo el impacto del nuevo itinerario y preparar una reforma más sólida y estructurada en el futuro.