Llega septiembre y en el Buen Fin comienza un periodo de reflexión. La hermandad ya prepara la fecha para el cabildo en el que propondrá a sus hermanos la incorporación de un misterio para el crucificado. Hecho que sucedió hasta 1998, con la retirada del antiguo conjunto y que vuelve a reunir a los hermanos de la corporación del Miércoles Santo para decidir el futuro patrimonial de esta hermandad.
El 19 de septiembre por la mañana, a las 10:30 horas en primera convoctaria y a las 11 en segunda y con con un cabildo general ordinario en como adelanto, la corporación celebrará este acto extraordinario que no pudo realizar el 15 de octubre de 2020 por la situación por entonces de la pandemia. Será en San Antonio de Padua. sede de l Buen Fin
El principal proyecto de este mandato
Es el proyecto bandera de Juan Antonio Díaz Rico desde que anunció su candidatura a hermano mayor. Esta junta de gobierno ha estado siempre decidida en recuperar un conjunto, ya sea de nueva talla o la ya existente, que dejó de procesionar en 1998.
Por ello el deseo de esta junta «fue dar voz y voto a todos y cada uno de nuestros hermanos para discernir el modo en que el Cristo del Buen Fin procesione cada Miércoles Santo, y en estos momentos no podemos asegurar que esto suceda, por lo que estaríamos cercenando el derecho al voto de aquellos hermanos, que bien por decisión propia, o bien por decisión de las autoridades, no pudiesen acudir a la cita». Un cabildo de vital importancia en la historia reciente de esta corporación que iba a copar los bancos de la iglesia de San Anonio de Padua. Por esto, «dado que esta determinación es de calado en el seno de nuestra hermandad, consideramos que no debemos hacerlo de manera impulsiva, sino de modo templado y sin premuras, sabiendo estar a la altura de las circunstancias de modo responsable», recalca la corporación.