Tiene claro que “lo extraordinario tiene que ser extraordinario”. Y así será porque el paso presentará novedades muy sustanciales en relación a como se ve el Jueves Santo. La más sobresaliente es que en el magnífico paso de Guzmán Bejarano saldrá solo el crucificado junto a una alegoría que hace referencia a la ‘fuente de vida’, un ángel al pie de la cruz con un cáliz recogiendo la sangre de Cristo, conjunto cedido por la Hermandad de las Aguas de Cádiz.
Habrá también cambio en la decoración floral, que será blanca, además de cambiarse los faldones por otros de color blanco, al igual que la cera. En la delantera se verá una representación del Cordero Místico y en la trasera, el pelícano símbolo del amor de Cristo.
En estrenos destacan el suelo de la mesa del canasto que pasa a ser de madera en una recreación del Calvario. También se verán dos nuevas cartelas en plata de las previstas en la en le diseño de la canastilla, la recuperación de la cruz de guía antigua y un lábaro o bandera que conmemora la efeméride fundacional que, en recuerdo de los estudiantes de empresariales que fundaron la hermandad, estará confeccionado en todo anaranjado, el mismo que luce la beca universitaria de Económicas.
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